Un equipo especial de la policía sufre los ataques de unos perros salvajes en un bosque. Se refugian en una mansión... para descubrir que está plagada de zombies y cosas mucho peores.
Port para Wii del remake para Gamecube de la primera entrega de la saga de survival horror por excelencia.
Los gráficos de Gamecube le sientan como un guante al juego, logrando una atmósfera muy tenebrosa que, junto con la música siniestra, consigue poner los nervios de punta y tener en tensión al jugador durante buena parte de la partida.
La cámara no se mueve, de manera que hay que desplazar al personaje por escenarios fijos. Esto tiene sus pros y sus contras, pero en conjunto lo veo como un buen sistema. Para empezar, al ser fondos fijos se puede hacer que tengan mejores gráficos y un mayor realismo, algo que a estas alturas no es necesario, pero sí lo era cuando salió el juego hace 13 años en Playstation. Además, está muy bien elegido el ángulo desde el que vemos el escenario, incrementando la sensación de miedo por la incertidumbre de lo que pueda haber más allá de lo que se muestra.
Al empezar se puede elegir entre manejar a Jill Valentine (fue mi elección) o a Chris Redfield, pero no me gusta cómo está hecho. En mi opinión, debería ser la misma historia independientemente de a quién escojas, yendo por un lado u otro según el personaje que tengas. Pues bien, en vez de eso la historia es diferente, de modo que lo que hace Jill si la eliges es lo que hace Chris si lo coges a él, con sólo ligeras variaciones que no motivan para pasarse el juego con ambos personajes, ya que en líneas generales hay que hacer lo mismo con los dos. Pongo el ejemplo del principio del juego para que quede claro. Si eliges a Jill, entran en la mansión ella, Barry y Wesker, mientras que Chris ha desaparecido. Si lo tienes a él, entran en la mansión Chris, Jill y Wesker, estando desaparecido Barry. ¿No sería lo lógico que con Chris jugases estando separado del resto del grupo desde el principio, ya que en la historia de Jill ha desaparecido?
Aparte de eso, que tampoco me molesta en exceso, hay un par de cosas que no han terminado de convencerme, aunque no por ello deja de ser un gran juego. Para empezar, la poca cantidad de objetos que podemos llevar. 6 con Chris, 8 con Jill. A poco que lleves la pistola, un arma más potente, munición para una de ellas, algo para curarte y la llave (me hace gracia que ocupa el mismo espacio una llave que un lanzagranadas xD) que necesites en ese momento ya ocupas 5 huecos. La otra pega es que hay muy pocos enemigos, con lo que la mayor parte del tiempo estás yendo de un lado a otro sin que nadie te moleste, aunque con el gusanillo en el cuerpo de si habrá un zombi a la vuelta de la esquina o entrará un perro de golpe por una ventana (cerrada). Bien pensado, quizá el hecho de que haya pocos enemigos hace que los sustos cuando aparece uno de la nada sean mayores, pero aun así hubiera preferido más bichos.
El avance por el juego se hace resolviendo multitud de puzzles, a veces un tanto retorcidos, no por el puzzle en sí sino porque tal objeto que consigues al principio del juego lo tienes que usar casi al final combinado con otro que conseguiste hacia la mitad para poder avanzar. A veces recoges algo y no sabes qué hacer con ello. Si lo llevas encima y resulta que no lo necesitas hasta mucho después, te ocupa sitio innecesariamente, y si lo guardas en un baúl y sí hay que usarlo, te toca volver a por ello. Un poco tocapelotas en ese aspecto. Aunque al menos cuando usas algo que no vas a necesitar más tienen la decencia de decírtelo, por si quieres deshacerte de ello.
Un 8.
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